Cerrar los ojos,
Desprendiéndome de todo lo que me rodea,
la rutina, los problemas, la materia.
Volar,
buscando donde anclar lo que nos queda.
Ser incorpórea atemporal, quizás etérea.
Llegando a ti,
en un suspiro sideral, en un vuelo de cometas.
Dejarme caer,
Exhausta y feliz,
reposando en el hueco de tu espalda,
donde habita mi existir
Y sentir, con el alma y la mente
el espíritu y el cuerpo
las intensas emociones que despiertas.
Y me elevabas…
Me atrapas, con la magia de tus besos,
de tu cuerpo y tus caricias…
tus deseos y los míos…
En la cima
Me transportas más allá del infinito,
toco el cielo con las manos, me deslizo.
Y me tomas en tus brazos, me aprisionas a tú pecho.
Acunándome despacio.
Me regresas.
En un sueño casi mágico, comenzamos otra vez…
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